domingo, 3 de julio de 2011

El Primero.

Fuiste el primer hombre en mi vida:
Xq fuiste el primero en pronunciar mi nombre,
El primero en mirarme a los ojos,
El primero en tomarme de la mano,
El primero en llamarme princesa,
El primero en decirme te amo.
El primero en tomarme en sus brazos,
El primero en llenarme de obsequios,
El primero en mostrarme el mundo,
El primero en romperme el corazón.

Hasta q comprendí tu loca forma de amar entendí q no podías haberme amado más ni de mejor manera, q no debí esperar más de lo q me dabas xq ya me habías dado todo al hacerme a semejanza tuya.

Nunca pude ocultar mi soberbia de saberme tu más querida, tu preferida.
Lo sabía Dios y lo sabía el mundo y tú nunca te afanaste en disimular.

Aún no sé el xq de tus lágrimas el día de mi boda, pero siempre supiste q era solo una ilusión. Y te mantuviste al margen, aunq siempre vigilante, y al menor indicio corriste a ayudarme.



No hubo hombre más feliz q tú aquella primavera pues el primero de tus nietos había llegado. Y lo cargaste, y lo miraste, y lo besaste y lo volviste a mirar; y lo cuidaste, lo mimaste, lo apretujaste, lo hiciste llorar y lo hiciste reir, lo regañaste y le perdonaste un mil travesuras, y lo llevaste a la playa, y lo llevaste a un circo... Creo q lo disfrutaste más q a nadie.

Y hoy te extraño solo xq no estás.
Extraño saber q estas ahi, q en cualquier momento te puedo llamar.
Extraño tu raro y obscuro sentido del humor, y tu risa clara, fuerte, profunda.
Extraño tu olor a limpio y a old spice.
Extraño tu comida y tu amor a la cocina, a tu ritual en las hornillas y al desorden q dejabas detrás de una maravillosa comida.
Extraño tu mezcal en el refrigerador.
Extraño tus ocurrencias y hasta tus groserias.
Extraño verte ir a correr con una bandana en la frente sin importarte lo q diga la gente.
Extraño tu afan x no aparentar ser más viejo q lo q tus canas presumían.
Extraño q nunca te dieras x vencido, pues hasta el ultimo momento luchaste para demostrarle al mundo q tú podías hacerlo.
Extraño tu pasión x todo, tu pasión x amar, tu pasión x vivir.
Tuve miedo de decirte adios pero tu no podias dejarme asi...Y creo q hoy, 9 años después, q ya no escucho tu voz, ni puedo sentir tus manos o tus brazos rodeándome, es cuando más vivo en mi estás.

Sigo siendo tu princesa consentida, solo q ya no me puedes romper el corazón.

Te amo Papá.

2 comentarios:

  1. Sin palabras, Wendy.....En serio, sin palabras.

    ResponderEliminar
  2. ;)
    Este año no me ha ido tan mal en este mes jeje! pero todavía falta lo más díficil...
    gracias x estar ahi, Chavita!

    ResponderEliminar